¿Alguna vez te has planteado ir a la consulta de un nutricionista o dietista de tu ciudad? Para muchas personas, acudir a
un profesional de la dietética y de la nutrición es sinónimo de “perder peso”, “adelgazar”, “comer bien”… pero hay muchas más razones para recibir la ayuda profesional para tratar un problema alimenticio.
No todo el mundo solicita la ayuda de estos profesionales para perder peso o adelgazar, aunque sea uno de los motivos más comunes. En este artículo te hablamos de otras razones por las cuales una persona puede pedir cita en la consulta de un nutricionista o dietista para pedir ayuda profesional.
Hay que tener en cuenta que hoy en día los Nutricionistas y dietistas son licenciados y diplomados. Por los que han obtenido una formación muy amplia en materias de alimentación, salud, psicología, hábitos alimenticios… Han adquirido conocimientos muy amplios que les permiten tratar otros problemas derivados de una mala alimentación o congénitos. Veamos a continuación 10 motivos para acudir al nutricionista.
1-Padecer problemas gastrointestinales.
El aparato digestivo es muy sensible y los malos hábitos alimenticios pueden provocar un deterioro grave del mismo. Una
intolerancia a un determinado alimento, patologías de mala absorción… Son problemas que pueden mejorar notablemente de la mano de un nutricionista o dietista, ya que te ayudará a descartar de tu dieta aquellos alimentos que no te hagan bien. Al mismo tiempo, incluirá en tu dieta aquellos nutrientes que no te perjudiquen. Si notas que cuando comer algo no te sienta nada bien, es posible que tengas alguna patología gastrointestinal y puede ser un buen momento para acudir al dietista.
2-Tener diabetes o problemas de salud cardiovascular
En términos médicos, este tipo de enfermedades se denominan silentes. Es decir, que a la persona no le duelen ni se dan síntomas evidentes de tener una enfermedad… hasta que es demasiado tarde. Un nutricionista puede ayudar a estas personas a llevar mejor su enfermedad con un buen plan nutricionista. Ayudar a mejorar la salud del paciente llevando una alimentación acorde a su problema. En el ámbito nutricionista y dietista es el área denominado “Nutrición clínica”. Elige bien a la consulta que pueda ayudarte, ya que no todas están especializadas en este ámbito. No lo pienses, si tienes diabetes o padeces problemas de salud cardiovascular, ir al dietista es un primer paso para mejorar tu salud.
3-Querer comer con inteligencia.
¿Sabes si lo que comes es bueno para ti? ¿Eliges en el supermercado los alimentos más adecuados? ¿Interpretas bien la información de las etiquetas de los productos? Si nunca te habías hecho éstas preguntas, quizás sea el momento de acudir a un dietista para encontrar las respuestas correctas. Siendo consciente de los que comes, te resultará más sencillo llevar
unos hábitos alimenticios saludables y comer mejor todos los días del año.
4-Mejorar tus hábitos saludables.
Comer bien todos los días del año no es nada fácil. Siempre surgen imprevistos que alteren tu rutina. De la mano de un dietista o nutricionista te resultará mucho más sencillo tener unos hábitos saludables sin caer en las tentaciones diarias. Conociendo tu caso al detalle, un profesional de la nutrición te dará consejos muy útiles para comer bien todos los días.
5-Si estás embarazada o planificas un embarazo
Llevar una buena alimentación durante el embarazo es fundamental para que, en el momento de dar a luz a un bebé, tu cuerpo afronte con garantías y energías un momento de gran estrés e intensidad. El cuerpo de la mujer vive grandes cambios con el nacimiento de un hijo. Además, una buena alimentación será muy positiva para el bebé. Un nutricionista o
dietista irá de la mano contigo en esta etapa tan importante para que no tengas carencias nutritivas.
6-Si eres lactante.
Una madre quiere lo mejor para su bebé. Pero para ello, lo primero es que ella esté bien alimentada. Un nutricionista
puede estudiar las necesidades alimenticias de la madre para que esté bien alimentada, y esa alimentación saludable se traslade también al bebé mediante la lactancia.
7-Menopausia y alimentación en la tercera edad.
La llegada de la menopausia es un momento complicado para la mujer y una etapa en la que su cuerpo sufre grandes cambios. Además, con la llegada de la tercera edad comienzan a aparecer patologías y enfermedades crónicas. Un nutricionista o dietista te puede ayudar a planificar la mejor alimentación posible para hacer frente a esta etapa de la vida con mayor fuerza, salud y vitalidad. Nunca es tarde para empezar a comer bien. Si eres una persona de edad avanzada, puede ser el mejor momento para comenzar a ir al dietista.
8-Tratamientos oncológicos.
El cáncer es una enfermedad que cada vez afecta a un mayor número de personas. Paralelamente a los tratamientos médicos necesarios para frenar la enfermedad, puedes llevar una alimentación adecuada para hacerle frente con más fuerza. Una alimentación correcta durante muchos años te puede ayudar a prevenir la enfermedad, pero no curarla. Escucha la opinión de un nutricionista o dietista al respecto. Te sorprenderá lo mucho que la alimentación afecta positivamente a nuestro organismo en la prevención de enfermedades.
9-Si padeces un TCA (trastorno de la conducta
alimentaria)
La anorexia, la bulimia, los atracones de comida provocados por episodios de ansiedad… Son problemas muy presentes en nuestra sociedad. Además de la ayuda que pueda ofrecerte un profesional de la salud mental, un nutricionista también puede ser un apoyo muy firme para dar pasos adelante y huir de estas patologías que tanto daño hacen al organismo de
quienes la sufren.
10-Si necesitas bajar o subir de peso
Es el último motivo de la lista, pero no por eso el menos importante. De hecho, es el más habitual para tomar la decisión y pedir cita en la consulta de un nutricionista o dietista. Con ellos, bajar de peso se hará de forma responsable y siempre
mirando por tu salud. Analizando tu caso de forma personalizada. Viendo cuál es tu alimentación actual. Tus hábitos alimenticios, rutinas… Para ayudarte a bajar de peso, un profesional analizará tu caso desde diferentes puntos de
vista.