Cuando creas un sitio web, necesitas un lugar para almacenar todos los archivos. Ese lugar es el servidor de tu empresa de hosting.
En este servidor, se almacenarán los medios, archivos, bases de datos y cualquier otra cosa necesaria de tu página web. La cantidad exacta de almacenamiento que tenga dependerá del plan de alojamiento que elijas.
Si acabas de llegar al mundo digital, probablemente solo alquilamos una parte de un hosting que está compartiendo con otros sitios web. A medida que aumentan tus necesidades de almacenamiento y tráfico, es posible que debas escalar para alquilar un servidor físico completo, o al menos usar los recursos de uno, con un servidor en la nube o VPS.
Cuando te suscribes a un paquete de hosting web, generalmente tendrás acceso al servidor a través de una solución como cPanel. Esto facilita la carga de tus archivos en el servidor. O bien, puedes instalar un CMS como WordPress para construir fácilmente tu web.
Para tener un sitio web en pleno funcionamiento, también deberás registrar un nombre de dominio. Una vez que compre esto, lo apuntará hacia su servidor, lo que le permite al navegador web saber que aquí es donde se encuentran tus archivos.
Luego, cuando una persona ingresa tu nombre de dominio o hace clic en un enlace a tu web, el navegador web obtiene los archivos del servidor y los muestra al visitante. Todo esto debería suceder en unos pocos segundos o menos. Si este proceso lleva demasiado tiempo, entonces debes acelerar tu sitio web o considerar cambiar de hosting.
Qué buscar en un hosting
Todos los servidores web no son iguales. El hosting que elijas tendrá un impacto dramático en el rendimiento de tu página, su tiempo de actividad y su experiencia general de administración del sitio.
Estos son algunos de los factores que querrá buscar al elegir un proveedor de alojamiento web.
Para empezar, debes de conseguir un host que realmente ofrezca el tipo de alojamiento que necesitas y que esté dentro de tu presupuesto.
Más allá de eso, aquí hay algunas características específicas que debe buscar:
- Ancho de banda/tráfico: su ancho de banda es la cantidad de tráfico que recibe cada mes, junto con la cantidad de páginas que ve cada persona. Por lo general, querrás seleccionar un plan de alojamiento web que pueda satisfacer tus necesidades máximas de ancho de banda.
- Almacenamiento: los archivos del sitio web generalmente son bastante pequeños, pero si estás almacenando una gran cantidad de datos de usuario, videos u otros medios, deberás asegurarte de que el almacenamiento provisto sea suficiente.
- Tiempo de actividad: la mayoría de los proveedores de alojamiento mostrarán su tiempo de actividad como un porcentaje. Es típico tener un tiempo de actividad del 99,9 %.
- Cuentas de correo electrónico: por lo general, su proveedor de alojamiento web te permitirá crear una dirección de correo electrónico asociada al dominio.
- FTP: FTP te permite cargar archivos directamente desde tu ordenador a tu servidor.
- Soporte: siempre es bueno saber que un equipo de soporte lo respalda. Busca un personal de soporte de calidad que haga un esfuerzo adicional para garantizar que cualquier problema se resuelva de manera oportuna.
¿Has aprendido algo bueno sobre el funcionamiento de los hosting? Esperamos que si. Si necesitas más información, te aconsejamos que hables directamente con algún proveedor de garantías o mejor aún, consulta esta página web dedicada a encontrar ofertas hosting.