El significado técnico de LED, es Ligth Emitting Diode, en castellano, es un diodo que emite luz. La principal característica de este tipo de diodos, es que forma un semiconductor especial capaz de transformar, la corriente de bajo voltaje que pasa por su circuito, en luz. La demanda de este producto ha aumentado considerablemente por su bajo consumo y baja contaminación ambiental.
Cuando se descubrió, la funcionalidad de los primeros led fue la de localizar si un equipo eléctrico estaba encendido a la corriente o no. Poco a poco, se fue desarrollando su tecnología e implantando en carteles informativos. En su formato original, sólo se encontraba en color rojo, lo que dificultaba su uso para otras aplicaciones.
Con el paso de los años y el trabajo realizado en desarrollar esta tecnología, ha posibilitado que en la actualidad se fabriquen todos los colores de la gama cromática visibles para el hombre y los no visibles como el infrarrojo y el ultravioleta. Los avances no solo fueron en la gama cromática, sino que también consiguieron aumentar considerablemente la eficiencia lumínica, alcanzando valores superiores en watios a los que produce una lámpara convencional.
Una característica que lo diferencia de las bombillas normales, es su constitución. Al estar compuesto de una base sólida y no tener ni componentes frágiles compuestos por vidrio, ni filamentos, admite mejor los posibles golpes sin romperse ni estropearse.
Si analizamos la forma de emitir luz de las bombillas incandescentes, fluorescente y/o halógenas, lo hacen de manera uniforme por toda la superficie, sin embargo, los LED solo emiten en la superficie donde está alojada el diodo, en la parte superior del chip y su proyección oscila en ángulos entre 120 y 140 grados.
Como hemos comentado con anterioridad, se mejoró considerablemente la eficiencia de los LEDs. Si comparamos la vida útil de ambos tipos de luces, los LEDS pueden alcanzar las 50 mil horas mientras que las bombillas incandescentes lo hacen unas mil horas y las fluorescentes unas diez mil. Otro factor importante es la mejora en el ahorro de consumo. Cómo consigue emitir mucho menos calor, su eficiencia alcanza casi un 85% de la energía consumida. Por este motivo las centrales eléctricas que distribuyen la demanda de energía, necesitan mucha menos energía y emiten mucho menos dióxido de carbono al medio ambiente. El cambio de las bombillas convencionales a las de tecnología LED, no solo ayuda a la economía de nuestros bolsillos, ya que hay produce la misma iluminación con un consumo inferior, sino que también ayuda al medio ambiente, ya que contaminan mucho menos por cada kilovatio hora producido.
Solo tiene un pero, la tecnología LED, su precio. El valor en el mercado es bastante superior al de las bombillas de filamento o el de los fluorescentes. Pero si analizamos las horas de vida útil de unas y otras y la potencia de iluminación que proporciona, comprobarás que es mucho más rentable el cambio a esta tecnología.
Poco a poco los domicilios están cambiando todos sus focos de iluminación a las bombillas LED.