Tal vez nunca te hayas pasado a saber cuánto tiempo pasamos al cabo del día en espacios cerrados. Pues ya te decimos desde aquí que son muchas horas las que no disfrutamos del aire fresco en nuestra cara, lo que está claro que no es precisamente bueno para la salud. Es precisamente por esto, por lo que nace el Well Building Standard.
Este sistema da una puntuación dinámica de medir, identificar y monitorizar aquellas propiedades de los edificios que puedan tener un impacto en nuestra salud y en nuestro bienestar. Pero para saber un poco más de este tema, vamos a profundizar más en qué consiste el Certificado Well.
Este certificado evaluará 10 áreas de actuación, y cada una de ellas con sus pertinentes medidas, las cuales pueden oscilar entre opcionales y obligatorias para conseguir esta certificación. Estas son las 10 áreas que se tienen en cuenta:
- Aire: Previene y elimina la contaminación en el aire, así como si es necesario su planificación.
- Alimentación: promueve un estilo de vida saludable y una correcta alimentación.
- Iluminación: Da la prioridad que merece la luz natural frente a cualquier fuente artificial.
- Agua: Tratar y filtrar.
- Movimiento: Fomenta un estilo de vida activo.
- Confort acústico: Prioriza el aislamiento.
- Confort Térmico: Evita pérdidas de tipo energético.
- Materiales: Fomenta el uso de materiales no contaminantes.
- Comunidad: Compromiso con los valores well.
- Mente: fomenta el uso de la política de bienestar corporativo.
Para que un edificio lo certifiquen como “edificación well” es muy fácil, deberá seguir los siguientes pasos.
Lo primero será tener en cuenta si el edificio cumple con los requisitos básicos que acabamos de citar para obtener la certificación, para ello también debe de prestar atención al diseño y la construcción del proyecto.
Durante el proceso de diseño y construcción, aprovecha para poder recopilar la documentación que muestre que cumples con los requerimientos Well.
Desde el inicio, es decir desde el propio diseño debes de tener en cuenta la certificación Well, ya que si no es muy fácil no cumplir los requerimientos básicos que requiere esta acreditación. Es importante que sea desde el mismo boceto, para que en el momento de la construcción se apliquen estas medidas.
La persona que te verifique si las medidas requeridas están bien ejecutadas para poder darte la acreditación, se llama Well Performance Agent, y también se ocupará de emitir el reporte final, para en caso de ser apta la construcción poder obtener la certificación.
Es necesario una vez al año, llevar a cabo tareas de mantenimiento y monitoreo, para seguir cumpliendo los requisitos.
La validez de este tipo de certificado es cada 3 años (tienes más información en la página web de KLlic Arquitectos, por lo que una vez pasado este tiempo, deberás renovar este certificado, pasando las pruebas pertinentes para justificar que el edificio sigue cumpliendo con lo necesario para la certificación Well.
Sin duda es una forma de apostar por la salud y una vida más confortable es el objetivo de este tipo de certificados, poder acreditar que incluso los edificios van a favorecer que tengamos una mejor vida.